domingo, 3 de enero de 2016

Capitulo 14: Fin de Semana

Ryas bebió de su taza de café cambiando los canales de su televisor recostada en el sofá largo de la sala de su casa. Era sábado y en realidad lo que más quería era estar encerrada en su casa sin nadie cerca, y no tanto que quería, era antisocial, pero de todas formas sus fechas del mes como omega estaban a un paso de ella, era preferible que no tuviera a nadie cerca, sería espantoso con esas cosas tan cerca...

-Aveces siento que me aburro... Pero a la vez no...-pensó tanteando con su cabeza para seguir bebiendo su café doblando un poco sus piernas. Su teléfono empezó a sonar llamando su atención, se extendió a la mesa tomándolo con su mano libre para verlo, se trataba de Kirino por lo que contestó.-¿Qué quieres?

-Hola, ¿Cómo estás? ¡Bien Kirino! ¿Tú cómo estás? Pues bien, ¡Gracias por preguntar!.-se quejó haciendo que Ryas pensara seriamente que ese chico tenía problemas mentales.-Gracias de que me merezco tu silencio

-¿Kirino, que quieres?.-preguntó la chica bebiendo de su café mirando la televisión

-Es que, Sam salió con Nanao a comprar algunas cosas por Navidad y no quería estar solo en casa... Así queeee

-Por favor, no me digas que estás afuera.-escucho una risa nerviosa al otro lado por lo que suspiro dejando su taza en la mesa.-Kirino, mi ciclo está a la vuelta de la esquina

-¿Me tengo que ir?

-Si quieres te abro y te saludo, pero luego te vas

-¡Está bien!.-Ryas colgó para suspirar levantándose del sofá. Camino a la puerta de la casa para abrirla consiguiéndose a Kirino parado en esta sonriendo ampliamente.

-Me caes tan mal

-También te quiero.-dijo sarcástico Kirino mirando a Ryas. Muy pocas veces la había visto de ropa casual, ahora vestía una chaqueta negra que le quedaba algo larga, unos shorts de Jean y llevaba medias blancas.-Te ves tan tieeeerna~

-Ahórrate los comentarios.-regaño para dar paso al chico. Este entro para seguir a Ryas a la sala.-¿Quieres café?

-Por favor.-pidió el chico quitándose su bufanda roja dejándola en el sofá para seguir a Ryas a la cocina.-Entonces, estás cerca del ciclo

-Si.-respondió con simpleza la chica sirviéndose una nueva raza de café y sirviendo la misma cantidad en otro

-Pero no hueles.-comentó acercándose a Ryas olfateando su cuello haciendo sonrojar a la chica.-Ni siquiera de cerca

-No te di el permiso para estar olisqueándome, ¿Sabes?.-dijo empujando con su codo a Kirino deslizando la taza en la mesa.-Y yo no sufro el pre-calor, por eso me mantengo al tanto de todo.-dijo para sacar un envase lleno de azúcar y una cucharilla poniéndolas en la mesa.-Por eso, Ahorita te vas de una vez.-aseguró echando azúcar a su café para sentarse. Kirino suspiro sentándose frente a ella haciendo las mismas acciones para beber su café

-Es extraño que un omega no sufra el pre-calor, nunca había escuchado eso

-Ahora lo escuchaste.-dijo bebiendo de su café mirando a otro lado. Kirino bajo su mirada para beber del suyo. Pasaron los minutos en silencio, Kirino se sentía nervioso, no quería mandar todo a la mierda con Ryas por estar allí y que en algún momento empezara el ciclo

-Creo que mejor me voy.-dijo dejando su taza en la mesa levantándose rápidamente. Ryas le miro hasta que salió de la cocina, se levanto con su taza en mano para luego mirar la de Kirino que no estaba vacía, le faltaba casi la mitad de la taza

-¿No terminaras tu café?.-preguntó saliendo de la cocina viendo a Kirino colocándose la bufanda en la puerta

-N-No quiero más.-dijo algo nervioso para abrir la puerta.-Nos vemos después.-dijo para salir sin dejar que Ryas dijera siquiera "Adiós"

Ryas ladeo un poco su cabeza mirando la puerta a su manera fría he indiferente. Kirino estaba nervioso, se le notaba a leguas, pero no era por su actitud ni nada de eso, la estaba cuidado de él mismo. Se sonrojó levemente mirando a otro lado bebiendo su café, Kirino aveces era muy considerado a pesar de su forma de ser tan molesta...

[•••]

Ruki caminaba en círculos en la sala de su casa con su esposa sentada en el sofá mirándole con brazos cruzados. Desde el miércoles, que habían nacido su hijo, no entendía qué diablos había pasado. Recordaba claramente que su esposa estaba sangrando, lo sacaron del cuarto y estaba tan alterado de saber qué diablos pasaba que lo sedaron. Pero ahora, lo último que recordaba era despertar en el sofá y que Reina le regañara de pasar la noche durmiendo como oso que ni siquiera vio a su hijo nacer

-¡Aún no lo entiendo!

-¡Ruki ya!.-se quejó la mujer ya harta de que su esposo se estuviera dando mala vida por algo.-¡Nada de lo que dices paso!

-¡Pero yo lo recuerdo claramente!

-¡Te quedaste dormido amor! ¡Ya está!.-se quejó la mujer suspirando ya cansada.-Mira, sé que te da tristeza haberte perdido de eso, pero ni siquiera le di a luz. Me hicieron cesaría.-dijo señalando la venda que cubría su vientre aún hinchado del embarazo

-Pero es que igual... No lo entiendo...-murmuro muy confundido tirándose al lado de su esposa.-Y aunque fuera cesaría... Me hubiera gustado mucho verle recién pero recién nacido... No después de horas de estar durmiendo...-dijo gruñendo de lo molesto que se sentía consigo mismo. Reina le miro antes de suspirar echándose un poco más lejos de su esposo para jalarlo dejando su cabeza en sus piernas y acariciar su cabello mientras Ruki miraba al frente, aunque con la vista des enfocada sin ver nada en específico 

-Amor, sé que te da mucha tristeza, pero ya no podemos hacer nada... Lo más importante es que el bebé esta aquí... Está con nosotros y está bien...-intento consolar acariciando la cabeza de Ruki pasando sus dedos entre sus rojos cabello

-Lo sé...-dijo suspirando antes de que se escucharán unos llantos a travez de una radio que tenían sobre la mesa

-Debo ir

-No.-dijo Ruki levantándose.-Yo iré.-dijo para pasar sus dedos entre el sedoso cabello de su esposa dándole un beso en sus labios antes de irse subiendo las escaleras dejando a Reina sentada en el sofá

-Uhm...-soltó Reina dejando sus manos en su cuello acariciandolo un poco desanimada.-No quiero decirte la verdad por qué no es nada grave... Pero sin duda te alterarías mucho...-murmuro suspirando levemente. Aveces Ruki era muy dramático o exagerado, y más si se trataba de ella, no quería alterarlo por pequeñas cosas completamente innecesarias...

[•••]

-Siento que la tele me aburre tanto que el mundo ya no sabe que sacar para que los crios se entretengan.-se quejó Yukiko pasando los Canales fastidiada con Fina al otro lado del sofá jugando en su teléfono, Miyuki a su lado recostada sobre ella mirando la televisión esperando algo entretenido he Izumi entre Miyuki y Fina con sus pies sobre la mesa jugando en su 3DS Nintendogs.-¡Esas idioteces vuelven a los niños muy retrasados!

-Yu-chan, si te vas a quejar, hazlo con los que crean esas cosas, no con nosotras.-dijo Miyuki suspirando escuchando como Yukiko bufaba cambiando los canales

-¡Haruyaaa!

-¿¡Queeee?!.-escucharon las cuatro la respuesta ante el llamado de Fina

-¡Voy a salir!

-¿¡A donde vas?!

-¡Al parque! ¡Vuelvo en unas horas!

-¡Ve con cuidado!

-¿Y eso que vas al parque?.-preguntó Izumi curiosa pausando su juego mirando a Fina que sonrío

-Voy a ver a Tsurugi-kun.-dijo levantándose corriendo a su habitación dejando a una sonriente Izumi, a Yukiko que giró sus ojos por el amor que había en el aire y a Miyuki que sonreía dulcemente. Se vistió de manera casual pero linda con unas medias negras y un short hasta sobre sus rodillas de color marrón. Una camisa negra con detalles amarillos Neon que formaban una imagen de un oso con gafas de sol en el centro, una chaqueta negra para el frío y unos tenis. Bajo rápidamente las escaleras para tomar sus guantes en la entrada para el frío.-¡Nos vemos más tarde!

-¡Diviértete!.-se despidieron Izumi y Miyuki

-¡Ya sabes!.-dijo Haruya bajando las escaleras de la casa.-¡Con cuidado!

-Si si, Baka, hablamos después.-se despidió de su hermano que le sonrió divertido para despedirse con su mano

-Saludas al Tsurugi.-dijo Suzuno bajado la escalera

-¿¡Qué?!

-¡Adiós!.-dijo Fina antes de salir corriendo de la casa

-Que cauteloso.-dijo sarcástica Yukiko cambiando la señal del televisor para encender la X-Box para jugar un rato

-Es divertido ver a Haruya molesto.-dijo Suzuno riendo divertido al ver a su esposo echando humo por sus orejas de lo molesto que estaba. Odiaba al Tsurugi

-¡Tengo hambre!.-escucharon la queja de Diamond

-Vamos a la cocina.-dijo Suzuno jalando a Haruya a la cocina mientras su hijo bostezando les seguía

-¿Cómo creen que le irá a Fina-chan?.-preguntó Izumi meciendo sus pies mirando a su prima y hermana

-Imagino qué bien...

-¿Dónde está Youseiko?.-preguntó Miyuki haciendo que Izumi y Yukiko le miraran para mirar sus consolas

-No quieres saber

-¿O-Ok?

[•••]

-Entonces... Ahora están bien.-Sam asintio afirmando las palabras de Hakuryuu mientras revolvía lo poco que quedaba de su helado con su mejilla apoyada en su mano libre.-Pero no pareces muy feliz

-Es que... One-chan aún se siente algo mal por haberse ido de esa manera de casa...-murmuro Nanao haciendo que Sam se enderezará en su silla recostándose en él espalda dejando la cuchara y el helado en paz para mirar a otro lado

-¿Aún? Tú no tienes culpa de nada, ya te lo dije

-La tengo de eso, no debí irme de esa forma.-se regaño a si misma suspirando para mirar a Hakuryuu.-Y sabes que es verdad, por mucho que me hubiera molestado, no puedo irme de casa así como si nada, después de todo, Ranmaru y Nanao se preocupan por mí.-dijo para mirar a su hermana que le sonrió dulcemente haciéndola sonreír

-Bueno, siendo sincero. Pienso que lo más importante de todo esto es que tú volviste y estás bien y todo está solucionado.-opino Hakuryuu bebiendo de su refresco mirando a otro lado

-Gracias.-volteo a ver a Sam que miraba a otro lado levemente sonrojada y con el ceño fruncido.-Sí no fuera por ti... No sabría que me hubiera pasado o si hubiera considerado arreglar todo con Ranmaru...-dijo para mirarlo relajando su rostro para sonreírle levemente.-Te lo agradezco, en serio.-dijo con esa leve y sincera sonrisa. Hakuryuu bebió de su refresco algo ido, estaba sorprendido, ¿Sam dando las gracias sonriendo? Eso sí era extraño 

-N-No fue nada...-dijo nervioso mirando a otro lado algo sonrojado.

-¿Sois novios?.-preguntó Nanao haciendo que ambos chicos se sonrojarán hasta las orejas

-¡N-No!.-gritó Sam haciendo reír nerviosa a su hermanita. Sam luego de gritar eso pensó las cosas, le había dicho a Hakuryuu que le amaba, el chico correspondía el sentimiento pero no llegaron a nada. Volteo a verlo notando que Hakuryuu tenía la misma expresión de confusión y duda.-No... No lo somos...-aseguró más tranquila haciendo que el chico le mirara con el ceño levemente fruncido pero confundido. Sam parpadeó varias veces sorprendida para mirar a la mesa, no eran nada, y nunca se dio cuenta de ese detalle

-¿Sucede algo?.-preguntó Nanao confundida al ver las expresiones en sus rostros

-No no, nosotros de confundidos.-aclaró Sam para levantar de su asiento.-Es mejor que vayamos volviendo a casa, le dije a Ranmaru que no volveríamos tan tarde

-Claro.-dijo Nanao levantando algunas bolsas del suelo para colocarlas sobre sus piernas. Sam se paró detrás de ella quitando los seguros de la silla de rueda de su hermana mientras Hakuryuu se levantaba tomando las bolsas que faltaban

-Nanao.-le llamo Hakuryuu haciendo que las más pequeña le mirara.-¿Te parece que Sam y yo hacemos linda pareja?.-preguntó haciendo que Sam le mirara sin dejar de caminar algo sonrojado mientras Hakuryuu miraba sonriendo a Nanao que asintio sonriente

-¡Se ven lindos juntos! Deberían ser novios

-Lo seremos en algún momento, tenlo por seguro.-dijo para guiñarle un ojo a la más pequeña que sonrió ampliamente aplaudiendo emocionada. Hakuryuu miro a Sam que miraba al frente con el ceño fruncido y sonrojada, no pudo evitar sonreír más. Era estupido, lo admitía, ¿Cómo no se dio cuenta que nunca le pidió ser su novia? Pero ya no cometería más errores...

No señor...

[•••]

Inés estaba acostada en su cama dando vueltas abrazada a un peluche de perrito. Había estado evitando estar sola con Tenma desde que este le había dicho que le gustaba, y ahora eso rondaba por su mente haciéndola sentir nerviosa y a la vez muy alegre

-¡Inés!

-¡Dime!.-respondió sentándose de golpe en su cama. Alguien tocó la puerta de su habitación.-Adelante.-dijo a lo que entro Tsunami con un rostro curioso

-Tenma está abajo.-Inés se sonrojó hasta las orejas para ocultar su rostro tras su perrito

-Y-Ya bajo.-dijo antes de escuchar la puerta cerrarse. Bajo su perrito asegurando que Tsunami no estuviera allí antes de volverse a tirar en su cama y dar vueltas.-¡No tienes por qué estar aquí!.-gritó contra su almohada antes de levantarse casi llorando para salir de su habitación deslizándose gracias a sus medias. Camino hasta la sala donde estaba Tenma hablando con Tsunami sobre algunas cosas de forma animada mientras que Tachimukai estaba sentándo al lado de Tsunami con Ketsune dormida sobre el.-Ho-Hola.-ante su saludo todos voltearon a verle poniéndola más nerviosa

-Ho-Hola Ines-chan.-saludo Tenma igual de nervioso que ella. Tachimukai hizo una mueca antes de levantarse

-Jousuke, acompáñame a acostar a Ketsune, es que pesa mucho

-A ver te ayudo.-dijo Tsunami levantándose cargando a su dormido hijo para ir sonriente a su habitación a recostar a su hijo

-Suerte...-susurro Tachimukai en el oído de Ines que se sonrojó ante eso. ¡Tachimukai era un cómplice! Los dos adultos se fueron con el más pequeño dejándolos solos pero ninguno de los dos se sentía con valor de hablar ni siquiera del clima

-¿Co-Como estás?.-preguntó Tenma internado que el ambiente dejara de ser tan tenso. Inés miro a otro lado llevando sus brazos tras su espalda

-Bi-Bien. ¿T-Tu cómo estás?.-preguntó sin voltear a verle

-Si-Siendo sincero... Mal...-Inés volteo a verlo notando que Tenma se había levantando y miraba a otro lado con el ceño fruncido algo triste.-Te dije... Lo que sentía... Y tú solo me evades... Pienso que tú no sientes lo mismo... Pero quiero que me lo digas

-N-No...-pensó Inés nerviosa y asustada. No quería que Tenma se hiciera malas ideas, le gustaba mucho, estaba enamorada de él, pero le daba mucha vergüenza admitirlo, ella no era así

-Quiero que me lo digas a la cara..-dijo para acercarse a ella tomándola de sus antebrazos sumamente sonrojado.-¡M-Me gustas mucho! ¡Y qui-quiero saber qué piensas de e-eso!.-dijo con todo el valor se podía tener mirando a Inés decidido esperando una respuesta. Inés se sonrojó notoriamente mirando sorprendida, nerviosa, confundida y ¡sumamente nerviosa! A Tenma

-Y-Yo...-soltó sintiendo como su corazón se aceleraba a cada segundo

-Po-Por favor... Dime la verdad...-pidió mirando a otro lado.-N-No importa si duele... ¡L-Lo soportare!.-dijo para volver a verla de manera decidida y levemente nervioso

-De-Deja de decir eso...-murmuro confundiendo a Tenma

-¿E-El que?

-"Tal vez no sientas lo mismo" "La verdad, aunque duela" L-La verdad es que... Ta-También me gustas...-murmuro muy sonrojada mirando a otro lado.-M-Me gustas mucho... Tenma-kun...-dijo para mirarle de reojo notando el rostro sorprendido de su amigo haciendo que bajara la mirada hecha un tomate

-¡Ines!

-¡Te-Tenma!.-gritó sorprendida cuando Tenma le abrazó con fuerza hasta levantarla del suelo

-¡No tienes idea de lo feliz que soy!.-dijo el chico mientras Inés se abrazaba a su cuello riendo levemente. No tenía miedo a caer, pero si le daba vergüenza la situación

-Te-Tenma bájame

-Cla-Claro claro.-dijo el chico para bajarla tomando sus manos.-Sal conmigo mañana, vamos a donde tú quieras

-¿Ma-Mañana?.-preguntó insegura mientras Tenma asentía efusivamente.-Bu-Bueno... Ha-Hay un circo nuevo... ¿Po-Podemos ir?...

-¡Claro!.-dijo Tenma para sonreír ampliamente.-¡Iremos mañana a donde tú quieras!.-aseguró sonriente. Inés sonrió enternecida aún sonrojada. Tenma era un amor, y le alegraba que ahora sus sentimientos eran mutuos

[•••]

-¿Qué compraras?.-preguntó Miyuki caminando por las aceras de Inazuma Town con Yukiko, ambas observando de reojo las tiendas que pasaban curiosas por algo que comprar

-No lo sé, me falta solo el regalo de ellos dos. Ya les compre algo a los demás.-dijo mirando al frente pensando en Yukimura y Yoichi

-¿Hasta es de Shiro-san y Atsuya-san?.-Yukiko asintio mientras Miyuki llevaba sus brazos tras su espalda mirando al frente.-Uhm... A Nishinosora-kun le gustan cosas para sí mismo, y Yukimura-kun... Bueno... A Yukimura-kun le gusta cualquier cosa que le des...

-Ese es el problema...-dijo Yukiko escondiendo su boca con su bufanda negra mirando de reojo a las ventanas de las tiendas.-Quiero darle algo, que de verdad le guste, y no algo que le guste solo por qué yo sé lo di...

-Entiendo...-dijo Miyuki deteniendo su andar en una tienda.-Espera espera, quiero entrar.-dijo jalando a la mayor de la mano ambas entrando a la tienda

-Uhm...-soltó la mayor viendo las vitrinas con bisutería expuesta, curiosa de su podría conseguir algo para Yoichi y Yukimura allí

-¿Cuánto cuesta?.-preguntó Miyuki acercándose al mostrador de fuera señalando una caja de terciopelo negra con un colgante con algunas teclas de teclado en metal y una pulsera con el mismo dije

-3.600¥ .-respondió la encargada sonriéndole a Miyuki quien hizo una mueca algo preocupada

-Tienes el dinero.-dijo Yukiko acercándose a ella.-Es algo que dices, que él podrá usar el colgante y tú la pulsera.-dijo a lo que Miyuki asintio

-Lo quiero.-dijo sonriente. La chica tomo la caja cerrándola

-¿Quieres que lo envuelva en papel de regalo o algo?.-Miyuki asintio efusiva haciendo sonreír a la chica. Envolvió la caja en un lindo papel de regalo navideño negro con detalles de bastones de dulce brillantes. Miyuki pago para tomar la bolsa con el regalo dentro más que feliz saliendo de la tienda con Yukiko

-Es muy lindo, a Shindou le encantará

-¿Tú crees?.-preguntó Miyuki levemente sonrojada abrazando la bolsa contra su pecho nerviosa. Vio a Yukiko asentir haciéndola sonreír encantada

-Aveces eres muy dulce.-dijo mirando con una ceja arqueada a Miyuki.-Me das diabetes.-Miyuki hizo unos pucheros golpeando levemente con su puño el brazo de Yukiko que miraba a otro lado. Aveces era muy mala con ella

[•••]

Fina soplaba sus manos meciéndose en un columpio en el parque esperando a Tsurugi. Se agarro bien a las cadenas del columpio para mecerse con más fuerza, en realidad lo que llevaba en ese lugar eran poco menos que cuatro minutos, y en ese poco tiempo ya unos 6 chicos se le acercaron para preguntarle por qué estaba tan sola

-Fina.-escucho a su lado haciendo que parar de mecerse para mirar consiguiéndose a Tsurugi

-¡Ya llegaste!.-dijo feliz levantándose acercándose al chico.-Cuando vine pensé que estarías aquí

-Cuando te escribí ya venía, pero mamá me llamo pidiéndome un encargado y tuve que atenderla.-dijo suspirando mirando a otro lado

-No importa, tampoco espere mucho.-dijo sonriente haciendo sonreír levemente a Tsurugi.-Pero tengo frío~

-Vamos a un café, compramos algo caliente de beber y algo de comer si quieres.-Fina asintio feliz y emocionada para ambos empezar a caminar al café más cercano.-Falta poco para terminar clases, la semana que viene literalmente

-Sip, y sigo feliz por qué el director discutió con mi profesor de matemáticas sobre lo ocurrido y lo despidió por grosero.-dijo Fina sonriendo orgullosa mientras Tsurugi suspiraba riendo levemente.-Ese profesor tenía algo contra mí

-Si... Algo contra ti...-murmuro Tsurugi restregando sus manos una con la otra haciendo que Fina le mirara de reojo. Se acercó a la puerta del café para abrirla dejando que Fina pasara primero y el le siguió entrando al establecimiento que no estaba muy lleno.-¿Qué quieres?.-preguntó sentándose en una mesa con Fina

-Uhm~ .-soltó observando la cartelera con las cosas.-Un chocolate caliente y un pastel de fresas con crema.-dijo meciendo sus piernas sonriente. Tsurugi asintió antes de que apareciera uno de los meseros sonriendo

-Bienvenidos.-dijo para mirar a Fina que le miro antes de desviar su mirada

-Un chocolate caliente, un café con crema, un pastel de fresa con crema y otro de chocolate.-dijo Tsurugi sumamente desesperado por qué ese chico se fuera o que dejara de ver a Fina

-En un momento se lo traeremos.-dijo el chico dándose la vuelta yéndose

-Tsurugi-kun.-el chico volteo a ver a Fina que le miraba curiosa sonriendo.-¿Dónde pasaras Navidad?

-Uhm... Con mi familia, lo más probable es que vayamos al hospital a visitar a Yuuichi.-dijo cruzándose de brazos sobre la mesa observando a Fina.-Imagino que tú estarás con tus hermanos...

-Es lo más probable.-dijo la chica sonriendo.-Me gusta estar con mis hermanos, además, ahora que nació Ryusuke quiero estar más con ellos

-¿Ryusuke?

-El hijo de Oni-san y Yagami-san.-dijo refiriéndose a Ruki y Reina. Tsurugi hizo una expresión de sorpresa

-Que bueno.-dijo sonriendo levemente la ver la felicidad que desbordaba Fina. La chica asintio efusiva antes de que el mesero trajera sus cosas dejándolas en la mesa yéndose

-Aunque quisiera verte en Navidad, sería muy lindo.-dijo sonriendo algo triste comiendo un poco de su pastel

-Nos podemos ver.-dijo Tsurugi bebiendo de su café haciendo que Fina le mirara.-Te prometo que nos veremos ese día

-¿Hablas en serio?.-preguntó sonriendo esperanzada. Tsurugi asintió sonriendo levemente para tomar la mano libre de Fina acercándola a su rostro depositando un suave beso sobre sus dedos haciéndola sonrojar

-Es una promesa...

[•••]

Minamisawa caminaba con la compañía de Kurama, Hayami y Hamano por el centro comercial. El iba bebiendo un vaso de refresco apenas escuchando las mil y un cosas de las que hablaba Hamano que, sinceramente, no le interesaban

-Oye, Minamisawa.-volteo a ver a Hayami que fue quien le había llamado.-¿Compraras un regalo para Kaori?

-Ya lo tengo

-¿Ya lo tienes?.-pregunto sorprendido Kurama mientras Minamisawa solo asentía bebiendo tranquilamente de su refresco.-Vale, estoy sorprendido

-No pensé que Minamisawa-kun fuera fan considerado para comprando con dos semanas de anticipación

-¿Disculpa?.-pregunto amenazante Minamisawa mirando con una sonrisa molesta a Hamano que se escondió tras Hayami que se puso nervioso 

-Hamano tiene razón.-dijo Kurama captando la atención de Minamisawa notando que el chico miraba a otro lado.-A ninguna de tus novias les regalabas con tanta anticipación, debe ser algo bueno, y eso que Kaori ni es tu novia.-acotó para voltear a verle algo sorprendido

-Es normal

-¡Kaori-saaan!.-todos voltearon a Hamano que salió corriendo a la posición de la chica que le miro entre asustada, sorprendida y nerviosa

-¿¡Kaori-san?!

-Que coño...

-Dios...-soltaron Hayami, Kurama y Minamisawa respectivamente viendo a la chica parada a un lado de un árbol de Navidad con un vestido rojo con cinturón negro, detalles en los orillas de felpa blanca y sin mangas dejando al descubriendo sus hombros y brazos, llevaba un sombrero de Navidad, unas medias negras y unas zapatillas negras. La chica miro de la misma forma a los otros tres chicos sonriendo más que nerviosa

-Ho-Hola chicos.-saludo riendo nerviosa moviendo levemente su mano cubierta por unos guantes rojos con detalles de felpa blanca

-Kaori-la chica volteo a un chico que vestía como un ayudante de Santa Clous que se le acercó.-Traerán los otros regalos del café, así que si quieres tomas un descanso, pero no te vayas del centro, ¿Vale?

-Claro.-dijo la chica sonriendo. El chico sonrió para irse de su lado. La chica suspiro para tomar un brazo de Hamano acercándose a sus otros tres amigos

-Les juro, que si le cuentan a alguien sobre esto, les arranco la cabeza a los cuatro.-Hamano y Hayami miraron nerviosos a la chica por su rostro amenazante, Kurama solo arqueo una ceja dando a entender que el no tenía razones para decir algo y Minamisawa cubrió su boca y nariz observando de pies a cabeza a la chica.

-Me sorprende que mama hiciera algo así...-murmuro recibiendo varios golpes en su brazo de Kaori mientras los otros tres miraban la escena con una gota en su nuca. No entendía que sucedía, pero era gracioso y bastante tierno a la vista

[•••]

-¡Te encontré!

-¡Nooo!.-se quejó Perseo antes de que Yukiko lo atrapara tirándolo al suelo haciéndole cosquillas ambos riendo

-¡One-sama nos encontró a todos!.-dijo Androme colgándose de la espalda de Yukiko que se hecho hacia detrás para que el pequeño con fuera a caer

-¡Pero eso no vale! ¡One-Sama es más grande y se le hace más fácil!.-se quejó Wolf, el hijo de Fubuki y Goenji haciendo pucheros, era el menor de todos tan solo por un año

-Bueno bueno, hagamos un trato.-la mayor se arrodilló mientras los cuarto pequeños se paraban frente a ella más que curiosos.-Yo me esconderé y ustedes me buscarán, quien me consiga, le daré una taza de helado del que quiera con lo que él quiera, ¿Les parece?.-los cuatro sonrieron asintiendo efusivamente.-Pero sin trampas, los cuatro se pondrán aquí.-señaló una pared mientras ellos miraban atentos.-Mirando a ella, colocare una alarma con 30 segundos en mi celular, al sonar, me buscarán por toda la casa, hasta en el pateo trasero

-¡Vale!.-los cuatro chicos vieron como la activaba el temporizador dejándolo sobre la mesa, los cuatro chicos se sentaron frente a la pared antes de que Yukiko activará su teléfono y se fuera rápidamente. Subió las escaleras de manera silenciosa y vio cada una de las habitaciones, entro a una enterándose que era la de Yoichi

-¡Allá vamos!.-escucho el grito efusivo de Apolo y Perseo. Cerró con cuidado la puerta y vio un baúl bastante grande estilo sofá frente a la cama, reviso que no hubiera nada dentro más que unas pocas prendas de ropa y se metió dentro cerrándolo. Cabía toda enrollada, pero no se notaba que estaba allí dentro, dudaba que los pequeños averiguaran dentro de eso

-¡One-sama!.-escucho la voz de Androme y sus pequeños pero veloces pasos por toda la habitación, puertas abrirse, algunos jadeos de el, tal vez haciendo fuerzas o algo parecido

-¿Qué haces Androme?.-Yukiko abrió enormemente sus ojos al escuchar la voz de Yoichi

-Busco a One-sama.-dijo el pequeño a lo que Yoichi río

-¿Están jugando?.-Yukiko imagino que Androme asintio sonriente ya que Yoichi suspiro riendo.-Te deseo suerte, aunque al parecer no está aquí

-Siii, eso parece, ya revise todo.-dijo el pequeño pisando con algo de fuerza el piso.-¡Ire a ver en la cocina!

-¡Ten cuidado!.-advirtió Yoichi suspirando y cerrando la puerta. Yukiko podía escuchar sus pasos por la habitación, no sabia que hacer, si seguir escondida allí o salir, no sabia que rayos era mejor.-Aveces siento que Terumi-san y Atsuya-san no confían en mí...-escucho que se quejó Yoichi y sintió como este se sentaba en la caja donde ella estaba escondida.-Decirle a Yukiko que los venga a cuidar... Incluyendo a Wolf... Me ven como un irresponsable...-se quejó pateando un poco la caja con su talón aunque no estaba muy enterado de sus acciones, a diferencia de Yukiko que sentía vibrar la caja con esas acciones.-Que raro, el baúl estaba más hueco.-Yukiko miro arriba cuando sintió la luz entrar en su escondite, pudo ver el rostro sorprendido de Yoichi mientras ella le miraba tranquila y fría

-Hola

-¿¡Cuánto llevas aquí?!

-¡Cállate!.-la chica salió rápidamente de la caja cerrándola para jalar a Yoichi al baño encerrándose ambos

-¡Nii-san! ¿Encontraste a One-sama?.-preguntó Wolf al otro lado de la puerta. Yukiko miró de manera amenazante a Yoichi que río nervioso

-¡No Wolf! ¡Yo me voy a bañar, debe andar en otro lado!

-¡Okaaay!.-la puerta del cuarto se escucho haciendo suspirar a Yukiko

-¡Casi haces que me encuentres!.-se quejó no muy alto haciendo que Yoichi hiciera unos pucheros

-¡¿Quien te dio permiso para esconderte en mi cuarto?!

-¡Ni que tuvieras el santo grial en ese baúl!

-¡Qué sabes tú!

-¡Había pura ropa!

-¡Pero aun así! ¡Me escuchaste diciendo esas cosas tan molestas y eso es lo que me frustra!.-admitió el chico antes de apretar sus labios sorprendido y muy sonrojado mientras Yukiko le miraba sorprendida.-Y-Yo...

-¿En serio piensas eso?.-Yoichi bajo su mirada aun nervioso y sorprendido de sus palabras.-Yoichi

-¡S-Si! ¡Tengo envidia de ti! Atsuya, Terumi y hasta Shiro y Goenji piensan que soy un irresponsable. Nunca me dejan cuidar de los trillizos o siquiera de Wolf, siempre que salen te llaman a ti o a Yukimura, nunca me dejan ser el hermano mayor responsable por alguna vez...-se quejó mirando a otro lado molesto aún sonrojado.-Es muy frustrante...

-No lo puedo culpar, con tu forma de ser tan vaga, malcriada y bromista es difícil confiar en que los cuidaras bien.-Yoichi se cruzó de brazos nada satisfecho con las palabras de Yukiko. Aunque al sentir un beso en su mejilla le volteó a ver sorprendido.-Pero yo confío en ti, sé que cuidarías bien de ellos, aunque no tengo el permiso de dejarte solo con ellos.-dijo sonriéndole levemente a Yoichi que se sonrojó.-Seguiré jugando con ellos, tu báñate, que le dijiste a Wolf que eso harías.-dijo para abrir la puerta del baño

-Oye.-Yukiko volteo recibiendo un rápido beso en sus labios de parte de Yoichi que le sonrió divertido.-Eres una dulzura~

-Y tú una molestia.-dijo saliendo del baño mientras Yoichi reía. Se cubrió la boca bastante sonrojada para salir del cuarto escondiéndose en el baño de invitados. Yoichi aveces resultaba ser muy molesto y egocéntrico, pero... Hay cosas de él que nadie conoce... Ni siquiera ella...

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